¿Qué es la vía lagrimal?
El ojo está conectado con la nariz a través de la vía lagrimal. Está formada por varios conductos que conducen la lágrima desde la superficie del ojo hasta la fosa nasal.
Existen varias estructuras:
- Puntos lagrimales: en la zona interna del párpado superior y del inferior se sitúan unos pequeños orificios, que son el inicio de la vía lagrimal. Actúan como los desagües del ojo. Deben estar situados en el sitio adecuado, estar en contacto con el globo ocular y tener un tamaño suficiente para que la lágrima entre por ellos y sea evacuada hacia la nariz.
- Canalículos lagrimales: los puntos lagrimales se continúan con los canalículos superior e inferior. La mayor parte de la lágrima se evacúa por el inferior, gracias a la acción de la gravedad. Los dos canalículos se unen en el canalículo común para llegar a la siguiente estructura.
- Saco lagrimal: en él desemboca el canalículo común. Está situado a cada lado de la nariz. En su interior se acumula la lágrima, que posteriormente es evacuada por otro conducto.
- Conducto nasolagrimal: lleva la lágrima desde el saco lagrimal hasta la fosa nasal, desembocando en el llamado meato inferior, por debajo del cornete inferior.
- Válvula de Hasner: se encuentra situada en la desembocadura del conducto nasolagrimal en la fosa nasal.
La obstrucción de la vía lagrimal puede encontrarse a cualquiera de estos niveles, siendo diferentes las soluciones para cada caso.
Los síntomas principales que aparecen en pacientes con obstrucción de la vía lagrimal son el lagrimeo y las conjuntivitis de repetición. Como síntomas derivados de estos podemos encontrar, entre otros
- Enrojecimiento de la superficie ocular.
- Dificultad para la visión, especialmente para la lectura.
- Eccema palpebral, porque la lágrima irrita la piel de los párpados, especialmente a nivel del canto externo.
- Hiperlaxitud palpebral y ectropión: porque el paciente suele frotarse los ojos con frecuencia y provoca el estiramiento progresivo del párpado.
- Dacriocistitis aguda: el saco lagrimal se llena de pus y provoca una inflamación muy dolorosa en el canto interno del ojo.
¿Qué enfermedades tratamos?
Obstrucción de la vía lagrimal en adultos:
Obstrucción de la vía lagrimal en niños